Actualmente, debido a la fuerte dependencia de la Unión Europea de proveedores de tierras raras tales como China o Turquía, Bruselas se encuentra promoviendo activamente que los Países Miembro de la Unión Europea aceleren la explotación de los minerales estratégicos.
En España existen dos yacimientos de tierras raras que podrían ser explotados: uno ubicado en Galicia y otro en Castilla-La Mancha. En ambos casos, las condiciones son buenas y adecuadas para la extracción minera. Únicamente se ha intentado explotar por el sector privado el yacimiento ubicado en Castilla - La Mancha, siendo denegados los permisos ambientales para ello debido a los impactos que la actividad extractiva tendría en el medio ambiente, incluyendo en los recursos hídricos.